El liderazgo según Max Weber

El liderazgo según Max Weber se caracteriza por ser un tema de vasta complejidad. Ha sido definido por múltiples autores a lo largo de los años, incluyendo desde los enfoques más clásicos o tradicionales hasta los más actuales; que suelen ser los que se comprenden con mayor facilidad en torno a la realidad que se vive hoy en día en los organismos, instituciones y empresas.

No obstante, esto no quiere decir que los clásicos no hayan tenido razón en sus postulados; sino que, al contrario, todas estas teorías se complementen para la creación de un concepto de liderazgo lo suficientemente vasto para abarcar desde la clasificación de liderazgo según Max Weber hasta la definición de liderazgo según Daniel Goleman.

Principales postulados de Max Weber

Desde el área de la sociología, uno de los autores que ha presentado mayores hallazgos sobre los estudios del liderazgo ha sido Max Weber, un economista y sociólogo alemán. Él enfocó sus estudios en las dinámicas económicas, sociales, culturales y hasta religiosas para la comprensión de la realidad social. De este modo, siendo sociólogo, Weber fue capaz de diferenciar los tipos de líder que se manifiestan en un círculo social, siendo la clasificación del liderazgo según Max Weber uno de sus mayores aportes al área.

Por este motivo, pensando el liderazgo como una función que ocupa un ente social en determinado círculo u espacio, el líder debe ser capaz de tomar decisiones acertadas en torno a las necesidades o intereses colectivos; así como también debe estar en la posición necesaria para recibir reciprocidad por parte de los seguidores.

Desde esta perspectiva, uno de los principales aportes del liderazgo según Max Weber, es que el líder corresponde con la naturaleza del grupo social al que se remite; donde de acuerdo a sus necesidades, a sus creencias, cultura e ideología, deberá variar la modalidad o metodología de aproximación. Es por esta razón que presenta la clasificación de los líderes, donde cada uno cumple con ciertas características que lo hacen destacar en función a otro y que determinará cuál de ellos es el más apto para la tarea que debe desempeñar.

Clasificación del liderazgo

Se considera que el liderazgo según Max Weber, ha sido el primero postulado capaz de abordar la complejidad del concepto de carisma. Debido a que ha sido el único que ha podido explicar con claridad este concepto y adecuarlo a su clasificación de líderes. Además, realizó estudios sobre la autoridad y las estructuras que lo llevaron a identificar la incidencia de estos tres elementos en la selección de un líder natural para un grupo determinado.

También, en su búsqueda por comprender el poder y diferenciarlo del liderazgo, Weber se planteó una distinción que supone la habilidad para forzar a la gente a obedecer o a hacer algo, logrando que estas órdenes sean ejecutadas de manera voluntaria, sin necesidad de hacer uso del poder, la fuerza y la autoridad.

Así pues, el liderazgo según Max Weber se presenta en tres tipos, que son:

Líder Carismático

Se trata de un líder entusiasta y carismático, al cual se les adjudican poderes y habilidades superiores a los demás miembros del grupo, siendo esta característica particular la que hace que los demás miembros del grupo cumplan con las funciones que el líder determina para ellos. Se trata de, tal como lo indica el liderazgo según Max Weber, hacer que los demás obedezcan a través del carisma y no de otros mecanismos de control que son comúnmente empleados para tal fin.

Algunos ejemplos claros que proporciona este autor respecto a este tipo de liderazgo, hacen referencia a las revoluciones sociales y los asuntos políticos donde los seguidores no se ven cohesionados por acciones violentas y autoritarias.

Líder Tradicional

La tradición es un elemento complejo a nivel social y cultural, debido a que hace referencia a una costumbre con la cual, los miembros del equipo ya están familiarizados. Por este motivo, en el liderazgo según Max Weber, aquellas personas que heredan el poder o que son líderes porque sus antecesores lo fueron, son reconocidos como líderes tradicionales, haciendo que la jerarquía de la cual provienen nunca muera.

Este tipo de líderes puede visualizarse con claridad en el caso de los reyes y príncipes. De hecho, los ejemplos de Weber al respecto se relacionan con clanes, linajes familiares y el funcionamiento de la estructura de la sociedad medieval, donde el poder es delegado o heredado.

Líder Legal o burocrático

El último tipo de líder distinguido por dicho autor, es el líder legal o burocrático, donde se incluyen aquellas personas que son electas para por vías legítimas o a través de los métodos fiscales adecuados, tal como elecciones o votaciones.

Este es, precisamente, el caso de los estados modernos, donde los líderes son electos democráticamente por los ciudadanos a través de un proceso legal y burocrático, en el que se hace necesario reconocer las habilidades del líder para poder llevar a cabo las elecciones, lo que amerita desde un principio poder de convocatoria y facilidad para persuadir a las personas.

Características del líder según Max Weber

Además de las definiciones de la tipología de liderazgo según Max Weber, también podemos encontrar que, dentro de sus teorías, se manifiestan una serie de características que deben ser cumplidas por el líder para poder llevar a cabo sus funciones dentro del equipo que lidera. Así pues, podemos observar las siguientes:

• El líder debe pertenecer al equipo o formar parte de este en el sentido estricto de la palabra, debido a que, de este modo, podrá internalizar con mayor facilidad las reglas sociales establecidas a lo interno del equipo, haciendo que sea mucho más sencillo alcanzar los objetivos.
• Tener una mente abierta, que le permita adaptarse al cambio y ser resiliente ante cualquier situación que pueda presentarse.
• Una actitud proactiva permitirá llevar a cabo proyectos más audaces, que, a su vez, consolidan otras tareas y mejoran las oportunidades del equipo.

A pesar de que las teorías del liderazgo según Max Weber no son contemporáneas, sus planteamientos aún son extrapolables a la realidad social que se vive en la actualidad, tanto en empresas como en organismos.